[MÚSICA] [MÚSICA] [MÚSICA] Hola a todos. Bienvenidos a este nuevo vídeo que vamos a dedicar al desmantelamiento de las tumbas del Valle del los Reyes. Como véis, vamos a tratar un tema distinto aunque, en cierto modo, es continuidad de los robos del imperio nuevo. También este tema desempeña un papel muy importante en esta monografía que os comentaba anteriormente que espero publicar en poco tiempo. Sin duda es un aspecto muy atractivo en cuanto a que de lo que hablamos ahora no es de robos cometidos por bandas de ladrones o bandas profesionales de ladrones, sino de un auténtico desmantelamiento oficial de tumbas del Valle de los Reyes por parte de la administración tebana. Fijaros en las imágenes que aparecen ahora en pantalla. En la parte izquierda vemos una serie de columnas que pertenecen a la residencia u oficina del escriba de la necrópolis Butehamón. Este escriba, como véis, tiene esta estructura dentro del recinto funerario de Ramsés III en Medinet Habu. Pero claro, si era escriba de la necrópolis, deberíamos esperar que su residencia estuviese en Deir el-Medina, el poblado de los trabajadores. Sin embargo, Butehamón pertenece a la época final de la dinastía XX. De hecho, es un personaje del que tenemos bastante documentación si consideramos los más de 130 graffiti que se conocen a su nombre. Tened en cuenta que en la montaña tebana se han registrado you más de 4.000 graffiti, pero de estos, más de 130, solo más de 130 pertenecen a un único personaje, a Butehamón o al menos lo mencionan. Esto da idea de la importancia que Butehamón tiene en el contexto de la montaña tebana, sobre todo porque vamos a ver cómo Butehamón, como funcionario de la necrópolis, pero no viviendo you en Deir el-Medina, puesto que Deir el-Medina you ha perdido toda utilidad como lugar del que parten los trabajadores que han de excavar nuevas tumbas reales, estamos hablando de finales de Ramsés XI y principios de la dinastía XXI en un momento en el que el Valle de los Reyes you no va a recibir más reyes. Por lo tanto, el equipo de la necrópolis que aún pervive va a hacerlo con otra función, no con la función de hacer nuevas tumbas de reyes, reinas y príncipes, sino con la función de localizar antiguas tumbas para desmantelarlas. Fijaros en los títulos que tiene Butehamón, este escriba de la necrópolis. Él es el que abre las puertas de la necrópolis, escriba real en el lugar de la verdad, inspector de los reclutas en el horizonte de la eternidad, inspector del trabajo en la casa de la eternidad. Evidentemente estos términos se refieren todos ellos a la necrópolis. Inspector de la casa del tesoro del señor de las dos tierras en el lugar de la verdad. Recordemos que la casa de oro es cómo en el papiro de Turín se denomina a la cámara sepulcral de Ramsés IV. Bueno pues, por los títulos de Butehamón, y considerando que estamos en una época en la que you no se hacen más tumbas en el Valle de los Reyes y en la que los pobladores de Deir el-Medina you han abandonado este poblamiento, es evidente que esos títulos nos están advirtiendo del papel que desempeña Butehamón en este desmantelamiento de tumbas a finales de Ramsés XI y principios de la dinastía XXI you en el tercer periodo intermedio. Arqueológicamente podemos demostrar actuaciones por parte de los funcionarios de la necrópolis en ese proceso de desmantelamiento del Valle de los Reyes. Por ejemplo, fijaros aquí. Tenemos una fotografía que nos muestra el sarcófago de Tutmósis IV. Hasta ahí todo normal, pero en la fotografía de la derecha, una fotografía de época de Howard Carter cuando a ´principios del siglo XX trabaja en la tumba, podemos ver cómo la tapa del sarcófago se ha colocado de manera, vamos a decir entre comillas, exquisita sobre una serie de bloques de piedra y sobre una cabeza de vaca. Si hubieran sido unos ladrones que hubieran buscado el contenido del sarcófago, que es lo realmente interesante, esta tapa hubiera sido lanzada al suelo y se hubiera fragmentado en múltiples pedazos. Sin embargo, esta actuación evidencia que quien abre el sarcófago quiere conservar esta pieza. Entonces, estamos hablando de una actuación probablemente vinculada a estos funcionarios que están desmantelando las tumbas. Lo mismo sucede, por ejemplo, en KV 20 en la tumba de Hatshepsut. Tutmósis I, también Howard Carter realizó la acuarela que véis en la parte derecha donde se observa cómo la tapa del sarcófago ha sido colocada y apoyada sobre una serie de piezas y no lanzada al suelo como hubiéramos esperado para una vulgar banda de ladrones. Tened en cuenta también que en este desmantelamiento de tumbas del Valle de los Reyes, estas piezas desempeñan un papel importante en cuanto a que son piezas con las que se va a realizar un comercio. Por ejemplo, lo que ahora vemos en pantalla es la tapa del sarcófago del rey Psusenes, el rey tanita Psusenes, cuya tumba halló Pierre Montet intacta en Tanis. Pero claro, la tapa originalmente es del faraón Merenptah. Recordad que el faraón Merenptah tiene al menos cuatro sarcófagos uno dentro de otro. Pues bien, este sería, según vemos desde el exterior, el tercero de esos sarcófagos. La tapa está intacta porque you procuraron sacar con cuidado estas piezas de la tumba y trasladarlas de Tebas ni más ni menos que a Tanis en el delta. Probablemente lo mismo se hizo con la tapa del sarcófago exterior. La tapa del sarcófago exterior tiene unos 4 metros de longitud, sin embargo quedó en la tumba de Merenptah en una posición intermedia entre la cámara sepulcral y la entrada de la tumba y no llegó nunca a salir de la tumba, aunque sin duda se estuvo trabajando en este menester. Aquí vemos señalada esa tapa del sarcófago exterior de Merenptah. Otras piezas que podrían proceder de tumbas del Valle de los Reyes o de la necrópolis tebana son las que ahora véis en pantalla. Claro, aquí no podemos estar seguros de si realmente proceden de las tumbas de estos reyes o no, pero no hay que descartar esa posibilidad. Por ejemplo, la pieza de la izquierda es una vasija de oro también hallada en Tanis y en ella podemos ver el cartucho de Nebpehtyra, es decir, del rey Ahmose, el fundador de la dinastía XVIII. Lo mismo para el brasero que véis en la fotografía central, los cartuchos pertenecen a Ramsés II. Bueno pues, es posible que estas piezas vengan de las tumbas de estos reyes. Y por supuesto tenemos, no solo una enorme cantidad de pruebas arqueológicas que podemos analizar, lo que habéis visto antes solo son unos pequeños detalles, también tenemos textos, muchos textos, algunos de los cuales son bastante claros. Por ejemplo, lo que véis ahora es la traducción de parte de un texto hierático conservado en el Museo Británico y en el que se da una orden. La orden la da el general Payankh, es un general de finales de Ramsés XI que está combatiendo en Nubia y desde Nubia manda cartas a sus colegas, digamos a sus aliados, que no son otros que los funcionarios de la necrópolis. Y Payankh dice, ordena, marchad y haced para mí una misión para la que vosotros nunca habéis ido. Evidentemente es una misión secreta, algo que nunca se había hecho. ¿Por qué? Porque o que se va a hacer ahora es destapar una tumba antigua, comprobar que está intacta y preservarla hasta que Payankh vuelva, porque una vez vuelva, por supuesto va a ser desmantelada. Vemos aquí un texto que evidencia cómo esa administración tebana de la época comienza, al principio de una manera secreta, a actuar sobre estas tumbas. Eso sí, en el Valle de los Reyes también podemos ver la impronta del paso de estos funcionarios en ese proceso de desmantelamiento. Por ejemplo, en KV42, esa tumba de Hatshepsut Meritra, a los pies de la tumba de Tutmósis III, vemos un grafito en el que se lee que se completó el trabajo en este lugar por el equipo de la necrópolis. Y en ese equipo se menciona a Butehamun, del cual de dice además que fue a la ciudad para ver el regreso del general, que no es otro que el general Paiján. Entonces, si estamos a finales de Ramsés XI y vemos que se está trabajando en este lugar, evidentemente, no es para hacer una tumba nueva, puesto que you no se hacen tumbas, sino para desmantelar tumbas antiguas. Lo mismo vemos en KV57, en la tumba de Horemheb. Aquí Butehamun dice que se realizó la orden en la casa de la eternidad, es decir, en la tumba de Dyeserjeperura-Setepenra, que no es otro que el faraón Horemheb. Por lo tanto, estamos ante una prueba más de que esta tumba es accesible para estos funcionarios que ahora lo que sin duda están haciendo es comenzar a desmantelar, a extraer los materiales más valiosos de estas tumbas. Hemos visto solo algunos pequeños detalles vinculados al Valle de los Reyes, pero la montaña tebana es muy extensa. Fijaros qué necesidad podría tener un funcionario o un equipo de funcionarios de la necrópolis para pasearse por toda esta montaña y dejar grafiti. Evidentemente, estas actuaciones se realizaban con un objetivo claro, que no era otro que buscar tumbas para desmantelar. Así, por ejemplo, encontramos en la montaña tebana un gran número de grafiti como el que ahora os pongo. Aquí, por ejemplo, Djehutymose y su hijo Butehamun dicen que fueron a mirar las montañas en el año 11. Deben referirse al año 11 de la uhem-mesut, a finales de Ramsés XI. Lo de mirar las montañas evidentemente es casi un juego de palabras. Lo que se hace es inspeccionar el terreno en busca de tumbas antiguas. En el wadi es-Sikkat et Taga ez-Zeide, que es donde encontramos la tumba de Hatshepsut como gran esposa real. También encontramos grafiti de ese tipo, por ejemplo, otra vez Butehamun acompañado de Ankhefenamun dice que está en el lugar para ver las montañas. En esta fotografía que tomamos hace unos pocos años se puede ver perfectamente cómo se disponen estos grafiti. Lo que tenéis a la izquierda es la entrada a la tumba de Neferura, la hija de Hatshepsut. Y justo a la derecha, lo que señala la flecha, es uno de estos grafiti. Podéis ver que están trazados con un corte, con una incisión y en ellos generalmente la información es muy básica. Se aporta una fecha, el nombre de uno o varios funcionarios y, a veces, el motivo por el cual se ha ido al lugar. pero también hay grafiti en los que se muestran signos como Nefer, como K que deben sin duda anunciar si el lugar es bueno o si hay una posible tumba en lo alto en esa zona. En estas fotografías, por ejemplo, podéis ver una de estas batidas que hemos ido realizando en la zona de la montaña tebana, no solo para ver los grafiti catalogados por diversos equipos, especialmente por el quipo de Jaroslav Cerny en los años 70, sino también en busca de nuevos grafiti o simplemente ver la posición de esos grafiti respeto a las tumbas conocidas. Es un trabajo muy interesante puesto que de alguna manera esto nos permite seguir los pasos de Butehamun pero también de otros funcionarios de la necrópolis. Aquí por ejemplo, en el wadi Gabbanat el-Girud podemos ver como Butehamun fue a investigar el lugar. Recordemos que aquí, en este lugar, al final de wadi Gabbanat el-Girud, encontramos una tumba de acantilado con los restos de tres esposas sirias de Tutmósis III. También si analizamos los vendajes o incluso ataúdes de muchas de las momias reales, quedan claros indicios de qué camino han seguido estas momias y cómo han sido también objeto de desmantelamiento durante la dinastía 21. Por ejemplo, Painedjem informa como en el año 6, you la dinastía 21 ordena repetir el enterramiento de Amenhetep I. Es evidente entonces que su tumba ha sido desmantela o está siendo desmantelada y quizás como acto simbólico, digno del monarca, se ofrece esa repetición de su enterramiento. También vemos para ese mismo año la repetición del enterramiento por parte de Painedjem del rey Ajeperenra, es decir, de Tutmósis II. Otro tipo de actuaciones quedan en evidencia cuando comprobamos cómo la momia de Painedjem I, este sumo sacerdote y rey que mencionaba antes, fue introducida en ataúdes que originalmente fueron pertenencia de Tutmósis I. Si os fijáis en estos ataúdes están desprovistos de toda lámina de oro que originalmente los cubría. Por ejemplo, en la momia de Ramsés IX se indica que esta momia fue arreglada en el templo funerario de Ramsés III, conocido como Tahut en esta época, el templo por excelencia. Entonces, vemos cómo muchas momias bajan a Medina Tabu para ser tratadas. Y ser tratadas significa desvendarlas de todos sus vendajes originales. Esto implica a su vez que son retirados todos los amuletos que contienen esos vendajes. Pensad, por ejemplo, en el caso también paradigmático de la momia Tutankámon. Solo la momia de Tutankámon entre sus vendajes contenía cerca de 150 amuletos. Son muchas piezas de oro y otros materiales, pero de oro sobre todo, entre esos vendajes. Con lo cual, lo que hacen estos sacerdotes en la dinastía 21 es desvendar las momias a golpe de azuela, puesto que los vendajes están pegados mediante cola o resina, y quitar todos esos amuletos, esos objetos valiosos, para después volver a vendar la momia con vendajes de la dinastía 21. En algunos casos, no consiguieron llevarse todo. Por ejemplo, aquí tenéis la momia de Seti I y unos rayos X de esa misma momia. Podéis ver cómo en el brazo izquierdo de la momia se aprecia con total claridad un amuleto que es sin duda alguna es un ojo, un udyat. También vemos cómo algunas momias de la importancia de Ramsés II llegaron a desvendarse, llegaron a descubrirse, durante este proceso de la dinastía 21 con textos que sin duda tenían un carácter apotropaico muy grande. De hecho, la inscripción que véis encima de la fotografía nos indica un hecho y es que algunos papiros de la dinastía 21 tienen referencias a que el texto fue hallado en el cuello o la nuca de Ramsés II. Es decir, si había pertenecido a Ramsés II tenía mayor valor. [AUDIO EN BLANCO]